Urología oncológica
Es la rama de la urología que estudia y trata los tumores de la vía urinaria, glándulas anexas como próstata y suprarrenal , y los genitales masculinos.
El tumor mas frecuentemente estudiado y tratado es el de próstata y es por ello que todos los hombre deben realizarse un chequeo anual que consiste en análisis de sangre para evaluar en antígeno prostático específico (psa) y sus variables (psa total y libre). El chequeo se debe realizar a partir de los 50 años y si la persona tiene antecedentes de familiares con cáncer de próstata podría iniciar antes. Se puede acompañar el chequeo con una ecografía renovesicoprostatica y tacto rectal, este último e esencial ya que hay tumores que presentan psa normal y se pueden palpar con lo cual se realiza diagnóstico mas temprano.
Los síntomas iniciales se pueden confundir con los de la hiperplasia benigna de próstata y casos avanzados dolor óseo, hematuria e insuficiencia renal obstructiva suelen aparecer.
El cáncer renal actualmente se diagnostica como un hallazgo accidental en la realización de estudios por imágenes como tomografías o ecografías pedidas por chequeo médico o por otras patologías. Este permite diagnostico en pacientes asintomáticos, más temprano y mejorar el pronóstico de esta patología. Las sintomatologías más frecuentes son tumor palpable en abdomen, hematuria de diferente gravedad y dolor en flanco o lumbar. El tratamiento habitual es la resección del riñón afectado o la resección de tumor sin la resección total del riñón. Las personas pueden continuar su vida habitual con un solo riñón o en casos especiales y con cuidados pertinentes hasta con un segmento de un solo riñón.
El carcinoma urotelial es el tumor vesical más frecuente y la sintomatología más frecuente es la hematuria (sangrado en la orina). Se puede diagnosticar por ecografía o cistoscopia y requiere de una resección endoscópica transuretral para confirmar el diagnóstico y evaluar el seguimiento a seguir.
Todos los tumores urológicos son tratables y tiene buena tasa de curación y dejar al paciente con buena calidad de vida luego del tratamiento.
El tumor testicular es más frecuente en hombres jóvenes y gracias a los tratamiento quimioterápicos actuales el porcentaje de curación es muy alto, requiriendo previamente la resección completa del testículo afectado. La fertilidad puede verse afectada parcial o totalmente pero se realiza conservación de espermatozoides para asegurar la descendencia del paciente.